Hoy en “Cosas que a nadie le importan”: 2015

Dejé de consumir marihuana porque cada vez que me fumaba un pito -especialmente las satánicas yerbas de laboratorio producidas en Estados Unidos– se me aparecían las preguntas “¿Qué chucha estoy haciendo acá?” y “¿Quiénes son estos huevones?”, generándome sudor de manos y pánico existencial.
Desde que llegué a Boston en agosto de 2013 me he hecho esas mismas preguntas, pero siempre en un tono de optimista curiosidad. Las respuestas no han llegado. O llegan de a pedacitos, apelando a la experiencia personal del viaje como una constante, una metáfora de la vida y otras huevadas que, pese a que suenan al más rasca material de autoayuda, tienen algo de verdad. Parte de mí se ha vuelto inmune a las grandes preguntas, así como a la soledad y a la pena. Creo que si le hiciera caso a ellas me hubiera devuelto a Chile hace rato, dejando a medias esta tardía transición a la adultez que me propuse (La idea no es tan estúpida: algunos se casan y/o tienen hijos. Mi apuesta fue geográfica).
¿Qué chucha estoy haciendo acá?
Me sumo a la idea de dividir el tiempo en años y el año en meses. El 2015 fue más o menos así.
ENERO
Comencé el año durmiendo en el sillón de la casa donde actualmente vivo. Fue una ruptura en buenos términos, pero donde compartir el espacio era, al menos, incómodo. Desde la ventana del living de la casona de Cambridge se veía el invierno instalando su culo gordo y helado en las calles y en el alma (que es donde se sienten las temperaturas bajo cero, la nieve y los árboles pelados). Lo bueno es que había pasajes a Chile para el 23 de enero.
FEBRERO
Vacaciones en Chile. Comenzaba un período de dos meses, que incluyeron unos días con mi familia adoptiva gringa visitando el terruño, viajes a Valparaíso, Valle del Elqui, Villarrica. Muchos asados con la familia y schops con los amigos. Venezia, 202, Berri, comida peruana y un par de completos en el Póker.
MARZO
Una extensión de febrero, pero como estaban todos los huevones ocupados, me dediqué a ver harta tele y dejar pasado a raja el sofá del living de mi casa paterna. Me dediqué leer, pensar en la tesis. Los pasajes de regreso eran para comienzos de abril y el fantasma de no usarlos estaba dando vueltas. Más schops, reencuentros y desencuentros necesarios.
ABRIL
Regreso a Boston. El invierno fue cabrón en esta ciudad, con records históricos de nieve caída. Encontré habitación en la casa de los amigos que me recibieron en su sillón en enero. Vivo a pocas cuadras de Central Square, entre el MIT y Harvard (soy más inteligente que todos los culiaos que estudian ahí, pasa que estudié en liseo municipal). Me tocaron un par de semanas de frío, pero el clima se puso agradable al ratito de mi llegada. Volví a trabajar en el Corner Pub
MAYO
Me sacaron la chucha a la salida de la pega. (Crónica completa: http://castrintonpost.com/?p=325).
Creo que entre lo curao que estaba al momento de la golpiza y la golpiza en sí, no me acuerdo de nada más ese mes.
Cumplí un año trabajando en la cocina del Corner Pub.
JUNIO
El verano llega a Massachusetts. Las caras se vuelven alegres, los pantalones más cortos y las cervezas robustas son reemplazadas por otras más livianas y refrescantes. Terminé las clases del master y empiezan las vacaciones de verano y el trabajo en la tesis.
JULIO
Cumpleaños 35. Asado regado con los amigos de por acá.
AGOSTO
Visita de mi prima Javi. Estuvimos en Boston, Nueva York, alrededores y entremedios. Fue bueno descubrir esta parte del mundo como turista. Javi había estado un año sin beber por razones médicas, pero un día nos quedamos hasta las 10 de la mañana bajando una botella de pisco. Mandamos videos curaos inspiracionales a toda la familia.
Mi amiga Antonine vino desde Canadá. Muchas cervezas, caminatas por la ciudad y recuerdos de su visita a Chile, donde nos conocimos y nos vimos por última vez 10 años antes del regado reencuentro. La amistad y el sentido del humor permanecen saludables.
Celia Marie entró una noche al bar. Hemos estado juntos desde entonces y me reservo los comentarios románticos porque sé que por querer ser Neruda en “Los Versos del Capitán” voy a terminar siendo Arjona en “Ella Y Él” (pero al revés).
SEPTIEMBRE
<3
XXX
13 13
OCTUBRE
Comienzo a trabajar en la tesis, que va a ser un ensayo sobre cómo las tecnologías afectan las retóricas y narrativas de la noticia. Formato: video.
NOVIEMBRE
Tesis y fritanga.
DICIEMBRE
Tesis, fritanga y fiestas de fin de año.